La habitación
Un día entré a mi habitación y miré la cama y estaba vacía, una cama grande en un cuarto que da a un gran ventanal, por las mañanas entra mucha luz, pero ella prefería tener las cortinas cerradas, le encanta dormir hasta tarde… algunas veces yo salía temprano a trabajar y ella dormía, regresaba de dar mi clases por la mañana y ella seguía dormida, me acercaba sigilosamente a ella y le daba un beso en la mejilla, así abría sus ojos y me regalaba una bella sonrisa.